Abordar la construcción desde una perspectiva eficiente e inteligente es la razón de ser de las ciudades inteligentes. Hay muchos aspectos diferentes que tienen un impacto en las ciudades inteligentes: energía, transporte, gestión de residuos, movilidad, por no hablar de la construcción eficiente de edificios inteligentes e infraestructuras integradas en la ciudad.
Pero, como establece McKinsey, las estrategias de ciudades inteligentes comienzan con las personas, no con la tecnología. “La “inteligencia” no se trata solo de instalar interfaces digitales en la infraestructura tradicional o de agilizar las operaciones de la ciudad. También se trata de utilizar la tecnología y los datos con determinación para tomar mejores decisiones y ofrecer una mejor calidad de vida”, aborda la compañía.
Vamos a adentrarnos en la tecnología que permite a la gente imaginarse las ciudades del futuro de una manera mucho más realista que la retratada por The Jetsons en los años 60.
¿Qué es una ciudad inteligente? Tecnología y ejemplos
¿Qué es una ciudad inteligente?
Una ciudad inteligente se define como una ciudad en la que las tecnologías de la información y la comunicación se utilizan para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos, para impulsar el uso eficiente de los recursos y para mejorar la sostenibilidad. Sobra decir que una ciudad se considera sostenible cuando sus edificios son sostenibles; pero ¿a qué nos referimos exactamente cuando hablamos de este tipo de edificios?
Un edificio inteligente es una estructura equipada con materiales y tecnologías innovadoras que permite automatizar y autorregular todos sus sistemas. Al hacer uso de tecnologías como IoT (Internet de las Cosas, por sus siglas en inglés), un edificio inteligente busca mejorar la usabilidad de la estructura, optimizar su eficiencia y mejorar su seguridad y accesibilidad, al tiempo que la hace más sostenible y consciente del medio ambiente.
Echemos un vistazo al consumo de energía de un edificio, por ejemplo. ¿Sabías que el 45% de la energía necesaria para poner en marcha un edificio está vinculada a su sistema de control de temperatura? Aunque este es su mayor gasto energético, la buena noticia es que, mediante la aplicación de diferentes técnicas de eficiencia energética, el consumo puede reducirse hasta en un 90%.
El consumo de energía de un edificio se puede optimizar completamente de muchas maneras diferentes, como aislando el envolvente del edificio para ayudar a reducir el consumo de energía, eliminando los puentes térmicos, instalando doble o triple acristalamiento, e innumerables otras medidas que son beneficiosas para el medio ambiente.
Las ciudades inteligentes ponen a trabajar los datos y la tecnología digital para tomar mejores decisiones y mejorar la calidad de vida. Los datos más completos y en tiempo real dan a las agencias la capacidad de observar los eventos a medida que se desarrollan, comprender cómo están cambiando los patrones de demanda y responder con soluciones más rápidas y de menor costo.
Sin embargo, al juntar muchos edificios inteligentes, no podemos llamar a una ciudad inteligente por sí sola. Una ciudad inteligente tiene tres capas de trabajo en las que la innovación y los nuevos modelos de negocio juegan un papel muy importante: su base tecnológica, impulsada por redes de comunicación masivas; aplicaciones específicas, las que traducen datos sin procesar en información y elementos de acción utilizando tecnología; y, por último, su uso entre la ciudad, el público y las empresas. Si los tres encuentran una implementación equilibrada y una adopción masiva entre el componente de la ciudad, nace una ciudad inteligente.
La consultora Deloitte incluso llama a la participación del público en las ciudades inteligentes una versión 2.0 de estas. “En última instancia, las ciudades inteligentes del mañana involucrarán no solo al gobierno, sino también a los ciudadanos, visitantes y empresas en un ecosistema inteligente y conectado construido sobre una infraestructura física basada en sensores”, expresaron.
La importancia de las ciudades inteligentes
Esencialmente, las ciudades inteligentes tienen el potencial de mejorar la calidad de vida urbana. Dada la migración masiva y la urbanización de las ciudades que está sucediendo semanalmente en todo el mundo, es imperativo que todos actúen para eliminar los errores del pasado que puedan tener un efecto negativo en la vida de sus convivientes y el medio ambiente.
Este fenómeno se presenta como un desafío para las ciudades, ya que están obligadas a proporcionar sostenibilidad ambiental y garantizar la seguridad física de sus habitantes, así como a luchar contra el mal uso de los recursos, la amenaza de aumentar las tasas de criminalidad, la pobreza y los disturbios civiles. Para evitar estos desafíos en la medida de lo posible, la mayoría de las ciudades prósperas buscan un crecimiento sostenible, pero también resiliente. La tecnología de una ciudad inteligente juega un papel importante como parte de la solución.
Beneficios de vivir en estas ciudades
Además de los beneficios que afronta la urbanización en las metrópolis, las ciudades inteligentes también presentan un enorme beneficio para la implementación de fuentes de energía sostenibles, otro gran reto para la industria de la construcción. Resaltamos estas tres fuentes de energía:
- Energía geotérmica: un tipo de energía renovable en la que el calor se extrae del suelo para proporcionar una fuente alternativa y energéticamente eficiente de calor ilimitado.
- Cogeneración: un sistema en el que se genera simultáneamente energía térmica y eléctrica.
- Fotovoltaicos integrados en edificios (BIPV, por sus siglas en inglés): la integración de módulos fotovoltaicos en la estructura de un edificio en particular, para reemplazar materiales más convencionales.
Otra característica que ofrecen este tipo de ciudades es la gestión eficiente de los recursos, incluyendo la información. Cuando hablamos de la conexión entre el sector de la construcción y las ciudades inteligentes, es importante que no pasemos por alto el papel que juega el Building Information Modeling (BIM). Mediante el uso de la metodología BIM, podemos anticipar el comportamiento energético de un edificio en particular, lo que permite tomar decisiones ambientales más informadas.
Más aún, las tecnologías inteligentes pueden mejorar el costo de vida, la seguridad, el tiempo de viaje diario, los trabajos, la conexión, el medio ambiente y la salud de las personas que viven en ellos hasta un 30%.
Tecnologías de ciudades inteligentes
La información es poder, y los edificios pueden generar mucha información de alto valor. No es de extrañar que el auge de las nuevas tecnologías e infraestructuras inteligentes haya sido testigo de run aumento en la industria de tecnologías inteligentes para las ciudades, pasando de una valoración de $410.8 mil millones de dólares en 2020 a una esperada de $820.7 mil millones de dólares para 2025.
Este crecimiento exponencial está guiado por los desarrollos globales en tecnologías inteligentes. Aquí hay algunos para tener en cuenta en las ciudades inteligentes:
IoT
El Internet de las cosas (IoT, por sus siglas en inglés) está en el corazón de las ciudades inteligentes. Según Oracle, el IoT describe la red de objetos físicos que están integrados con sensores, software y otras tecnologías con el fin de conectar e intercambiar datos con otros dispositivos y sistemas a través del internet.
Estos pueden ir desde herramientas domésticas ordinarias hasta objetos industriales más sofisticados. Con más de 7 mil millones de dispositivos IoT conectados hasta la fecha, los expertos creen que este número puede llegar hasta los 22 mil millones para 2025.
Blockchain
¡El rey de la transparencia y la eficiencia! Blockchain es una base de datos descentralizada que sirve como un registro público y almacena información sobre activos y transacciones entre dos o más partes. El beneficio más significativo del blockchain está en la confianza y la facilidad de acceso a documentos importantes (como las facturas).
El aumento en la complejidad de la construcción moderna significa que los proyectos pueden llegar a ser difíciles de coordinar rápidamente, y potencialmente conducir a la desconfianza y las disputas si los involucrados no están de acuerdo con los detalles del proyecto. Una mejor documentación y nuevos sistemas que promuevan la transparencia de los datos pueden proporcionar importantes beneficios para la industria, haciendo del blockchain un elemento esencial para el desarrollo exitoso de las ciudades inteligentes.
Tecnologías en la nube
Las tecnologías en la nube ofrecen a las empresas la capacidad de almacenar, compartir y utilizar datos desde cualquier lugar, siempre y cuando tengan un dispositivo electrónico (como una computadora portátil, un teléfono inteligente o una tableta). Para las empresas de construcción, un claro beneficio de la computación en la nube es el ahorro de costos, ya que reduce el gasto de capital y mejora los procesos de organización de la empresa. Estos ayudan a expandirse a nuevos mercados, aceleran el proceso de toma de decisiones, y mejoran la comunicación con las partes interesadas y los clientes.
Ejemplos de ciudades inteligentes en el mundo
La American Society of Mechanical Engineers (ASME) identificaron estos ocho factores como los más cruciales para catalogar una ciudad inteligente: movilidad, salud, seguridad, agua, energía, compromiso y comunidad, desarrollo económico y vivienda, y gestión de residuos. Algunas de las ciudades que destacan como ejemplo de ciudades inteligentes son:
Dubái
La casa del Burj Khalifa, el edificio más alto del mundo está en camino a digitalizar todos sus servicios gubernamentales, incluyendo casi 100 iniciativas que abarcan el transporte, las comunicaciones, la infraestructura, la electricidad, los servicios económicos y la planificación urbana. El gobierno local tiene como objetivo operar 100% sin papel para finales de 2021 y está aprovechando las tecnologías emergentes como el blockchain y la inteligencia artificial para recrear experiencias cotidianas para residentes y visitantes de Dubái, haciéndolas más personalizadas, fluidas, eficientes e impactantes.
Boston
La casa de los Boston Red Sox fue una de las primeras ciudades en experimentar con iniciativas inteligentes en EE. UU. Abrieron su Distrito de Innovación en el puerto marítimo en un esfuerzo por ser un catalizador público para la innovación. Su plan maestro se centra en la participación ciudadana, o “urbanismo participativo”, utilizando una colección de aplicaciones para que los ciudadanos se involucren entre sí e informen sobre los peligros, el tráfico y las oportunidades. Smart Streets es su apuesta más reciente para mejorar la seguridad de su comunidad y comprender cómo las personas navegan e interactúan dentro de la ciudad.
London
La ciudad británica tiene un programa para proporcionar conectividad 5G a toda la ciudad, lo que requiere nuevos desarrollos para proporcionar una cobertura completa de fibra óptica. Del mismo modo, las farolas icónicas de Londres también están siendo equipadas con una colección de sensores y puntos de carga para vehículos eléctricos.
El gobierno de Londres ha estado promocionando el programa de Smart London desde el 2018 con el fin de convertirla en “la ciudad más inteligente del mundo”.
Barcelona
La vibrante ciudad española es constantemente elogiada por abrazar la tecnología inteligente, a la que se le atribuye la revitalización de una economía que se deterioró en la década de 1980. En 2011, la ciudad acogió la primera Smart City Expo y Congreso Mundial para promover una ciudad autosuficiente de barrios productivos, dentro de un área metropolitana hiperconectada y con cero emisiones.
Barcelona ahora está saturada de sensores montados en postes de luz LED que monitorean el tráfico, la calidad del aire, la actividad peatonal y el ruido, y que pueden atenuar o apagar las luces según sea necesario. Los contenedores inteligentes equipados con aspiradoras succionan los residuos en el almacenamiento subterráneo, lo que reduce los olores y disminuye el número de viajes desde los camiones de recolección.
¿Qué está haciendo CEMEX Ventures para llevar las ciudades inteligentes al presente?
Como los ojos de CEMEX en el exterior, en CEMEX Ventures estamos constantemente en la búsqueda de nuevas tecnologías que puedan ayudar a hacer de las ciudades inteligentes una realidad en más lugares. Como ayudan a impulsar la innovación en muchas áreas del proceso de construcción, al apostar por las tecnologías inteligentes garantizamos que se aborden múltiples retos con las soluciones que potenciamos, ya sea creando las nuestras propias, invirtiendo en startups o colaborando con ellas para potenciar su solución.
Por ejemplo, inversiones en startups como Modulous ayudan a abordar la necesidad de la crisis de vivienda en las grandes ciudades, así como implementar una nueva forma de construcción que reduzca el impacto ambiental y facilite el diseño, la construcción y el diseño de implementación de una estructura a través del uso de un software de construcción modular altamente diseñado.
Todo lo que hacemos en CEMEX Ventures es de beneficio para el surgimiento y desarrollo de las ciudades del futuro y continuaremos abordando los desafíos más apremiantes que surjan en la industria para garantizar que las ciudades inteligentes puedan convertirse en una realidad en más lugares.
